Dos esposos, afanados por los favores presidenciales, gastan toda su fortuna quedando en la desgracia. Léanlo en el presente resumen de: “El Banquete”, escrita por Julio Ramón Ribeyro.
Resumen Del Cuento El Banquete
Don Fernando Pasamano, transformó su residencia. Se vio obligado a renovar todo el mobiliario, desde las consolas del salón, hasta el último banco de la repostería. Fue necesario construir un jardín. En quince días, una cuadrilla de jardineros japoneses edificó un hermoso jardín. Lo más grande sin embargo fue la confección del menú. Por esta razón, sus ideas acerca de que debían servirse, en un banquete al presidente eran confusas.
Don Fernando había invertido en este banquete toda su fortuna. Pero, al fin de cuentas, todo dispendio le parecía pequeño, para los enormes beneficios que obtendría de esta recepción. “Con una embajada en Europa y un ferrocarril a mis tierras de las montañas rehacemos nuestra fortuna.” Decía a su mujer.
Pero faltaba saber si el presidente vendría. Don Fernando se puso a esperar la información. Al cabo de cuatro semanas la confirmación llegó. Aquel día fue un día de fiesta. Los primeros en llegar fueron los soplones. Luego fueron llegando los automóviles. De su interior descendían: ministros, parlamentarios, diplomáticos, hombres de negocios, hombres inteligentes.
Llegó el presidente escoltado por sus edecanes. Don Fernando olvidándose de las reglas de etiqueta, movido por un impulso de compadre, se le echó en los brazos, con tanta simpatía que le daño una de sus charreteras. Comieron y bebieron hasta que se inició la ronda de los discursos. Don Fernando veía, que el banquete seguía sus propias leyes. Al fin cerca de la medianoche, logró conducir al presidente a la salita de música y allí, le deslizó al oído su modestia. “Pero no faltaba más (replicó el presidente). Justamente queda vacante la embajada de Roma, propondré su nombramiento es decir lo impondré. Y en lo que se refiere al ferrocarril, hay diputados en esa comisión y los citaré, a mi despacho para que se resuelva el asunto en la forma que más convenga”. Y se retiró. A las tres de la madrugada quedaron solos don Fernando y su mujer y se fueron a dormir. Al día siguiente fue despertado por unos gritos, era su mujer, que traía un periódico en las manos. Leyó los titulares y sin proferir una exclamación se desvaneció sobre la cama. En la madrugada aprovechándose de la recepción, un ministro había dado un golpe de estado y el presidente había sido obligado a dimitir.
Mensaje De La Obra El Banquete De Julio Ramón Ribeyro
Mensaje: La vanidad, la lujuria y el orgullo, no son buenos caminos a seguir.
Para finalizar solo agradecimientos por la atención. Hasta un próximo resumen.
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