Resumen Capítulo 21 Don Quijote Parte 2
DONDE SE PROSIGUE LAS BODAS DE CAMACHO, CON OTROS GUSTOSOS SUCESOS.
Con grandes voces y algarabía recibieron a los novios. Venía la hermosa Quiteria algo descolorida y debía de ser de la mala noche que siempre pasan las novias en componerse para el día venidero de sus bodas. Y oyeron grandes voces –Esperaos un poco, gente tan inconsiderada como presurosa. Era el gallardo Basilio. Llegó en fin cansado y sin aliento, y estas razones dijo: “…Yo por mis manos quitare lo imposible quitándome a mí de por medio… ¡Viva, viva el rico Camacho con la ingrata Quiteria largo y felices siglos, muera el pobre Basilio, cuya pobreza corto las alas de la dicha!…” y diciendo esto se arrojó sobre la punta del bastón y quedó bañado en sangre y tendido en el suelo, con voz doliente y desmayado dijo:
- Si quisieses, cruel Quiteria, darme en este último y forzado trance la mano de esposa.
En oyendo don Quijote dijo que Basilio pedía una cosa muy justa y puesta en razón. Todo lo oía Camacho, y todo lo tenía suspenso y confuso. Llegó en fin Quiteria y puesta rodillas, le pidió la mano por señas, y Basilio desencajado le dijo:
- ¡Oh Quiteria, que has venido a ser piadosa a tiempo… que me das a escoger por tuyo…!
Quiteria tan honesta y toda vergonzosa, asiendo con su derecha la mano de Basilio le dijo:
- Te doy la mano como legitima esposa,
- Si doy –respondió Basilio- no turbado ni confuso sino con el claro entendimiento, y así me doy y me entrego como tu esposo.
- Y yo como tu esposa –respondió Quiteria-
Estando pues asidos de la mano, Basilio y Quiteria el cura lloroso le dio su bendición. Y de pronto Basilio se pudo de pie –milagro, milagro, gritaba la gente. Milagro no, sino industria, industria. Y comprendieron que todo fue un engaño. Finalmente el Cura y Camacho se tuvieron por burlados y escarnidos. Camacho quería venganza desenvainaron sus espadas, pero don Quijote intervino y digo:
- Teneos, señores teneos que no es razón toméis venganza de los agravios que el amor nos hace, y advertid que el amor y la guerra son una misma cosa. Quiteria era de Basilio y Basilio de Quiteria. Camacho es rico y podía comprar su gusto cuando y donde quisiere. Y con esto blandió tan diestramente su lanza.
Consolado pues y pacifico Camacho y los de su mesnada, todos los de Basilio se sosegaron y así fueron llevaron a don Quijote y Sancho estimándole por hombre de valor y de pelo en pecho.
Resumen Capítulo 22 Don Quijote Parte 2
DONDE SE DA CUENTA DE LA GRAN AVENTURA DE LA CUEVA DE MONTESINOS, QUE ESTA EN EL CORAZÓN DE LA MANCHA, A QUIEN DIO FELICE CIMA EL VALEROSO DON QUIJOTE DE LA MANCHA.
Grandes fueron los regalos a don Quijote. Se dijo que Basilio lo planeó todo y que Quiteria no sabia nada. Finalmente, tres días estuvieron con los novios donde fueron regalados y servidos como cuerpos de rey. Pidió don Quijote al diestro licenciado le diese un guía que le encaminase a la cueva de Montesinos porque tenía deseos de entrar en ella y ver las maravillas que de ella se decían. El licenciado le dijo que le daría a un primo suyo. Y así platicando llegaron por la noche y albergaron en una pequeña aldea a dos leguas de la cueva de Montesinos. Compraron cien brazas de soga, y el otro día a las dos de la tarde llegaron. Don Quijote se amarró la soga en el jubón de armar y luego se hinco de rodillas e hizo una oración al cielo pidiendo a Dios que le ayudase, y luego dijo: -¡Oh señora del Toboso! Si es posible que lleguen a tus oídos las plegarias y rogaciones de este venturoso amante, ruego tu amparo ahora que es menester. Y diciendo esto se descolgó al fondo de la caverna espantosa. Sancho echó su bendición, iba don Quijote dando voces que le dieran soga, hasta que se acabó las cien brazas de soga, la cual es recogida después de media hora, sin peso alguno con mucha facilidad, señal que hizo imaginar que don Quijote se quedaba adentro. Sancho lloraba amargamente pero llegando a las ochenta brazas sintieron peso y don Quijote salió. Suplicáronle Sancho y el primo les dijese lo que en aquel infierno había visto. Merendaron y don Quijote le dijo, no se levante nadie y estadme hijos, todos atentos.
Resumen Capítulo 23 Don Quijote Parte 2
DE LAS ADMIRABLES COSAS QUE EL EXTREMADO DON QUIJOTE CONTÓ LO QUE HABIA VISTO EN LA PROFUNDA CUEVA DE MONTESINOS, CUYA IMPOSIBILIDAD Y GRANDEZA HACE QUE TENGA ESTA AVENTURA POR APOCRIFA.
Don Quijote contó lo que en la cueva de Montesinos había visto, y comenzó en el modo siguiente: A obra de doce o catorce estados de la profundidad de esta mazmorra, se hace una concavidad, y determiné de entrar en ella, de repente me salteó un sueño profundísimo, desperté y vi que me encontraba en el más bello, ameno y deleitoso prado. Vino un venerable anciano y me dijo: Luengos tiempos ha, valeroso caballero don Quijote de la Mancha, te quiero mostrar las maravillas que este transparente alcázar atrapa. Soy el mismo Montesinos, de quien la cueva toma su nombre. Entramos y vi un sepulcro de mármol, sobre el vi a un caballero tendido y el anciano me dijo: Éste es mi amigo Durandarte, flor y espejo de los caballeros enamorados y valientes de su tiempo y le tiene encantado como me tiene a mí, Merlín, aquel francés encantador. Y luego dijo el mísero Durandarte:
“¡Oh mi primo Montesinos! Lo postrero que os rogaba. Que cuando yo fuere muerto. Y mi ánima arrancada. Que llevéis mi corazón. Adonde Belerma estaba. Sacándome del pecho. Ya con puñal, ya con daga.”
Montesinos se puso de rodillas y dijo que había llevado su corazón a la presencia de su señora Belerma y con Guadiana vuestro escudero y con la dueña Ruidera sus siete hijas y dos sobrinas, a todos encanto Merlín, a sus hijas las convirtió en lagunas, ahora le llaman laguna de Ruidere y las dos sobrinas de una orden santísima que se llama San Juan. Guadiana fue convertido en un rio llamado de su mismo nombre. Y sabed primo que aquí tenéis aquel don Quijote de la Mancha quien ha resucitado la ya ándate caballería por cuyo medio y favor tendría ser que nosotros fuésemos desencantados. Y vi que por otra sala pasaba una procesión, Montesinos me dijo que eran sirvientas de Durandarte y Belerma. Estaba la señora Belerría la cual con sus doncellas cuatro días a la semana hacían esa procesión.
A esta sazón dijo el primo:
- Yo no sé, señor don Quijote como vuesa merced en tan poco espacio de tiempo, haya visto tantas cosas y hablado y respondido tanto.
Don Quijote agregó que Montesinos le mostró tres labradoras las mismas que habían visto a la salida del Toboso. Cuando Sancho oyó decir esto a su amo, pensó perder el juicio o morirse de risa, que como él sabía del fingido encanto de Dulcinea. Y así nuestro caballero seguía contando lo que sucedió en la cueva de Montesinos.
Resumen Capítulo 24 Don Quijote Parte 2
DONDE SE CUENTAN MIL ZARANDAJAS TAN IMPERTINENTES COMO NECESARIAS AL VERDADERO ENTENDIMIENTO DESTA GRANDE HISTÓRIA.
Don Quijote, Sancho y el primo conversan sobre lo sucedido en la Cueva de Montesinos. Atardeció, el primo propone dirigirse hacia una ermita, donde habita un ermitaño caritativo y que recibe huéspedes, en el camino se cruzan con un hombre que daba varazos a un macho llevando armas y se dirigía a una venta que quedaba más allá de la ermita. A poco más llega a la ermita donde no estaba el ermitaño, así picaron hacia la venta y a poco tiempo se le cruza un mancebito que iba a la guerra. Y así llegaron a la venta, al tiempo que anochecía. Don Quijote pregunta por el hombre de las lanzas y alabardas, el cual le respondió que en la caballeriza estaba acomodando su macho. Lo mismo hicieron de sus jumentos el primo y Sancho, dando a Rocinante el mejor pesebre y el mejor lugar de la caballeriza.
Resumen Capítulo 25 Don Quijote Parte 2
DONDE SE APUNTA LA AVENTURA DEL REBUZNO Y LA GRACIOSA DEL TITERERO, CON LAS MEMORABLES ADIVINANZAS DEL MONO ADIVINO.
Y el hombre de las lanzas y alabardas, sentándose en un poyo, y teniendo como auditorio al paje, Sancho, don Quijote y al ventero, comenzó a decir de esta manera:
Sucede que a un regidor, se le perdió un asno, ya pasaban quince días que no lo encontraba, hasta que otro regidor del mismo pueblo le dijo que le había visto en el monte, y que el asno estaba tan flaco y montaraz. Se compromete a ayudarlo y se fueron al monte, y al no encontrarlo, se dividen de modo que uno iba por un lado y el otro por la otra. Y que de trecho en trecho rebuznarían y que el asno al oírles respondería. Pero sucede que ambos casi al mismo tiempo rebuznaron, y cada uno fue engañado del rebuzno del otro. Se volvieron a dividir y a cada paso se engañaban y volvían a juntarse, y el animal no aparecía. Más ¿Cómo había de responder el pobre y mal malogrado, si le hallaron en lo más escondido del bosque, comido de lobos? Con esto desconsolados y roncos se volvieron a su aldea, donde contaron a sus amigos, vecinos y conocidos cuanto le había acontecido en la búsqueda del asno. Y desde allí son burlados y conocidos como el pueblo del rebuzno. Así con mano armada han salido los burlados contra los burladores. Para eso llevo todas estas lanzas y alabardas. Y con esto dio fin a su plática el buen hombre. Poco después llegaba a la venta el maese Pedro, titirero, con un mono adivino y el retablo de la libertad de Melisendra. Adivina a don Quijote quien era, y también a Sancho quienes quedan pasmados y absortos. A continuación arma su retablo, para dar placer a cuántos estaban en la venta, sin paga alguna. Don Quijote no estaba nada satisfecho con las adivinanzas del mono. Y le preguntan a maese Pedro si podría adivinar lo que sucedió en la cueva de Montesinos. El mono se puso delante de nuestro caballero, luego saltó sobre el hombro izquierdo de su amo, y hablándole al parecer en el oído, luego maese Pedro dijo: -El mono dice que lo que pasó en la cueva son falsas y en una parte verosímiles. Y así se acomodaron otros de pie y acomodados don Quijote, Sancho, el paje y el primo en los mejores lugares.
Resumen Capítulo 26 Don Quijote Parte 2
DONDE SE PROSIGUE LA GRACIOSA AVENTURA DEL TITERERO CON OTRAS COSAS EN VERDAD HARTO BUENAS.
Maese Pedro, arma su retablo, donde escenifica el rapto de la hermosa y sin par Melisendra. Gaiferos va a su rescate a las torres del alcázar de Zaragoza, donde habita el Rey Marsilio de Sansueña. Melisendra se descuelga del balcón para ponerse en ancas del caballo de su buen esposo, los dos huyen. Salen a perseguirla los moros con tan esplendida caballería. Viendo y oyendo, pues tanto morisma y tanto estruendo, a don Quijote parecióle ser bien dar ayuda a los que huían, desenvaino la espada y comenzó a llover cuchilladas sobre la titerera morisma, derribando, destrozando, estropeando y descabezando a otros. El maese Pedro grita y llora:
- Deténgase don Quijote y advierta que estos que derriba, destroza y mata, no son verdaderos moros, sino figurillas de pasta.
Sancho intervino diciendo que su amo pagará todos los destrozos cometidos. Don Quijote pagó todo incluso la huida del mono. Al final todos se despidieron y fueron en busca de otras aventuras.
Resumen Capítulo 27 Don Quijote Parte 2
DONDE SE DA CUENTA QUIENES ERAN MAESE PEDRO Y SU MONO, CON EL MAL SUCESO QUE DON QUIJOTE TUVO EN LA AVENTURA DEL REBUZNO, QUE NO LA ACABÓ COMO EL QUISIERA Y COMO LO TENÍA PENSADO.
Cuenta Cide Hamete Benengeli, que Ginés el que hurto el rucio a Sancho, temeroso de no ser hallado por la justicia por sus infinitos delitos decidió pasarse al reino de Aragón y cubrirse el ojo izquierdo. Y compró aquel mono que adivinaba lo pasado y lo presente. Así como entró en la venta reconoció a don Quijote y Sancho por cuyo conocimiento le fue fácil poner en admiración a todos los que allí estaban. Poco después don Quijote y Sancho se encaminan por la orillas del rio Ebro. Al tercer día de caminata oyó el rumor de tambores, de trompetas y arcabuces. Subió a la loma y avistó dos cientos hombres armados y vio que en su estandarte decía:
- No rebuznaron en balde, el uno y otro alcalde.
Por esta insignia sacó don Quijote que aquella gente debía de ser del pueblo del rebuzno. Fue llegando a ellos don Quijote y les dijo: que no se pueden tomar las armas por niñerías, y por cosas que son antes de risa y pasatiempo. A su vez Sancho, dice que cuando era muchacho rebuznaba, cuando se le antojaba, sin que nadie le fuese de mano. Y luego puesta las manos en la narices, comenzó a rebuznar tan reciamente, pero uno de ellos que estaba junto a él, creyendo que hacia burla de ellos, alzó un varapalo y lo tumbó al suelo. Don Quijote reacciona y es atajado, ante la lluvia de piedras, huye dejando a Sancho, quien es puesto en su jumento y le dejaron ir tras su amo.
Resumen Capítulo 28 Don Quijote Parte 2
DE COSAS QUE DICE BENENGELI QUE LAS SABRÁ QUIEN LE LEYERE, SI LAS LEE CON ATENCIÓN.
Huyó don Quijote seguíale Sancho, atravesado en su jumento –subamos y apartémonos-dijo Sancho. Y poco a poco se fueron a emboscar en una alameda que hasta un cuarto de legua de allí se parecía. Sancho se quejaba de dolor, poco después le solicita la paga por los servicios de escudero que le habría brindado hasta el momento, por todo pide treinta reales.
- Está muy bien –replicó don Quijote- y conforme al salario que vos habéis señalado, mirad lo que os debo y pagaos, como os tengo dicho de vuestra mano.
- Sancho añade que la ínsula le prometió hace veinte años, tres días más o menos.
Dióse don Quijote una gran palmada en la frente y comenzó a reír de buena gana y dijo:
- Pues no anduve yo en Sierra Morena, sino dos meses apenas. Ahora digo que quieres que se consuma es tus salarios el dinero que tienes mío.
A continuación al ver la mal intención de Sancho le dice que se vaye con su familia. Sancho llora y le pide que le perdone. Con esto se metieron en la alameda. Y al salir el alba siguieron el camino buscando las riberas del famoso Ebro.
Resumen Capítulo 29 Don Quijote Parte 2
DE LA FAMOSA AVENTURA DEL BARCO ENCANTADO.
Ya en las orillas del rio Ebro don Quijote ordena a Sancho que amarré a su jumento y a Rocinante, con la finalidad de subir a un barco, que allí estaba. Sancho obedece y ata a los animales. Ya en el barco los dos se alejan y en esto descubrieron unas grandes aceñas (molinos de agua) que en la mitad del rio estaban. Y dijo don Quijote en voz alta a Sancho:
- ¿Ves? Allí ¡Oh amigo! Se descubre la ciudad, castillo o fortaleza donde debe de estar algún caballero oprimido, o alguna reina, infanta o princesa mal parada.
En esto, el barco entrado en medio de la corriente del río, comenzó a caminar no tan lentamente como hasta allí. Los molineros de las aceñas salen a detenerlos. Y don Quijote puesto en pie en el barco, con grandes voces comenzó a amenazarlos, diciendo esto echo mano a su espada y a esgrimirla en el aire en contra de los molineros, los cuales oyendo y no entendiendo se pusieron a detener el barco, que ya iba entrando en el raudal y canal de las ruedas. Sancho y don Quijote dieron en el agua, los dos son sacados por los molineros. Llegaron en esto los pescadores dueños del barco, don Quijote se compromete a pagar por los daños ocasionados, eran cincuenta reales. Y así volvieron a sus bestias y a ser bestias, don Quijote y Sancho, y este fin tuvo la aventura del encantado barco.
Resumen Capítulo 30 Don Quijote Parte 2
DE LO QUE LE AVINO A DON QUIJOTE CON UNA BELLA CAZADORA.
Caballero y escudero llegaron a sus animales, al otro día don Quijote vio a lo lejos a una gallarda señora, sobre un palafrén o hacanea blanquísima, y dijo a Sancho:
- Corre, y di a esa señora que yo el Caballero de los Leones iré a besar sus manos, y servirla en cuanto mis fuerzas pudieran.
Partió Sancho a la carrera, encontró a la bella cazadora y le dijo:
- Hermosa señora, aquel caballero que allí se parece, llamado el Caballero de los Leones es mi amo. Envía por mí a decirle a vuestra grandeza de darle licencia que es de servir a vuestra encumbrada altanería y fermosura.
- Aceptó la señora y preguntó: este vuestro señor ¿no es uno de quien anda impresa una historia que se llama el Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha?
- El mesmo es señora –respondió Sancho-
- Id hermano Panza, y decid a vuestro señor que él sea bien llegado y el bien venido a mis estados –dijo la Duquesa-
Sancho fue a su amo y le contó todo lo conversado. Ambos acuden ante la presencia del Duque y la Duquesa con tan mala fortuna que don Quijote se cae de Rocinante, y Sancho se queda colgado de un pie de su rucio. Ya presentados el Duque, la Duquesa, don Quijote y Sancho conversan sobre Dulcinea y encaminaron hacia el castillo. Mandó la Duquesa a Sancho que fuese junto a ella.
Lo Mas Buscado:
- https://resumencortodelaobra com/el-quijote-de-la-mancha-parte-2-resumen-capitulos-21-30/